diciembre 04, 2013

Claro que vale la pena vivir.

Vivir para ser participe de la vida, de crear vida, de trasformar vidas, reparar o crear vínculos de amor dañados, de ayudar, de dar sonrisas, de ser productivo en este mundo, de ser uno más de los buenos,
los que miran al frente y dan esperanza, y riegan su amor y Dios los cuida.
Esta noche me duermo pensando en las personas del mundo, con un enorme deseo de que encuentren
el amor que está dentro de ellos y sanen. Que ninguna mala experiencia nos impida seguir contibuyendo a este hermoso planeta, a la magnificencia de la naturaleza, a los corazones humanos.
El mal es un embustero, jamás dejes que te toque, porque siempre nos quiere tocar, nunca dejes que dentro de ti se manifiesten malos deseos ni sentimientos, armonía!, si algo sale mal es parte de la vida, no es una maldición, siempre sé bueno, siempre siembra amor en cada paso y si te enojas hazlo con amor!
Iluminé mi corazón, yo cuidaré mucho de él toda la vida.
Ya no quiero hacerme nunca daño, quiero mostrarle al mundo que vale la pena vivir.
Dios, la vida, lo bueno y el amor bendiga a quienes me leen.


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