Versos prohibidos que me naces en todo lo que ansío.
Que me llenas los oídos con la voz más suave,
que encantas mi mente con tanta personalidad
y sencillez natural, como aquel castillo de piedra en Turquía
al que quieres entrar.
Y te ríes con la voz más dulce
y tocaste a mi puerta con las manos más suaves
y presentas tanto como nada, y como si nada
me naces en todo lo que ansío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario